miércoles, 15 de octubre de 2014

Violencia Institucional contra Xóchitl Nohemí Preciado Ramírez

Por conducto de la magistrada presidenta del tribunal de lo contencioso administrativo del estado la licenciada Gloria Gertudris Tapia Quijada y de la directora del ISSSTESON Teresa Lizárraga Figueroa, el gobierno del estado de sonora ejerce violencia institucional contra Xóchitl Nohemí Preciado Ramírez al negarle la toma de nota a que tiene derecho por haber ganado las elecciones sindicales dos veces en el SUEISSSTESON, es decir, el gobierno del estado usa mujeres para hacer violencia contra otra mujer, perpetuando con ello la cosificación de la mujer en los puestos públicos, pues no existe libertad en el actuar sino que están sujetas las mujeres servidoras públicas a los intereses partidistas del gobierno del estado torciendo para ello las leyes. La violencia institucional es el acto u omisión de las y los servidores públicos de cualquier orden de gobierno que discrimine o tenga como fin dilatar, obstaculizar o impedir el goce y ejercicio de los derechos humanos de las mujeres así como su acceso al disfrute de políticas públicas destinadas a prevenir, atender, investigar, sancionar y erradicar los diferentes tipos de violencia. Además, los tres órdenes de gobierno, a través de los cuales se manifiesta el ejercicio del poder público, tienen la obligación de organizar el aparato gubernamental de manera tal que sean capaces de asegurar, en el ejercicio de sus funciones, el derecho de las mujeres a una vida libre de violencia y no como en el caso particular acontece. Según lo contado por Xóchitl en la Mesa Cancún, no hay ya pretexto para que le otorguen la toma de nota como secretaria del SUEISSSTESON y la magistrada Gloria Gertudris, dilata y obstaculiza su derecho como mujer a desempeñarse como líder sindical al negarse hacerlo dejando pasar el tiempo como medida dilatoria; de igual manera, en el ISSSTESON existe una campaña de persecución y obstaculización del ejercicio de libre expresión de la Secretaria Electa, conforme al estatuto del sindicato por parte de Teresa Lizárraga pretendiendo con ello impedir que se denuncien los actos de represión de que es objeto. Lo lamentable penoso y triste de este asunto, es que la violencia institucional que ejerce el estado para impedir que ocupe el cargo que gano dos veces, se traduce en más violencia social contra la mujer y que se usen mujeres para dicha encomienda, que deja muy mal paradas a las servidoras públicas, como dicen cuerpo de mujer no garantiza conciencia de género. La marcha del no al novillo contestataria; crítica de un sistema caduco y cuestionadora de un orden que perpetúa las injusticias contra ric@s y pobres, no es la marcha de los potentados del Valle del Yaqui, es la marcha que toma el pulso de un gobierno que ya se va, pero que se le mueve los pies para quedarse. No fue el evento que los priistas hubieran deseado para sí, pero a falta de una izquierda combativa ellos se quedan con todo, valió la pena asistir y marchar junto al sur de sonora. Mario Luna y Fernando Libre. Peña Nieto no atiendo a madres y padres de ABC Las fosas hacen de Guerrero queso gruyere y de los estudiantes nada. Fuera Aguirre. Gisela Peraza Libre.

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